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4 comentarios
Eva dice:
20 Nov 2013
Pablo creo que cualquiera que ande perdido con la nanotecnología debería leer tu post! Ya estaba harta de las definiciones de diccionario y de las comparaciones que apuntas, en plan “sabes que en un pelo hay como diez a la tropecientos mil millones de partículas nano?”. Porque es ilustrativo? Bueno, decorativo o llamativo quizá, pero no se si sirve de verdad para hacerte una idea.
Gracias, voy a ser como los niños pequeños y ahora siempre que piense en nanociencia voy a imaginar a los soldados de Asterix (están locos estos romanos…). Muy buen ejemplo.
Y tienes razón, sí a la nanohorchata con propiedades mágicas como poder beber tres litros sin sufrir indigestión, y no a los nanofartons.
Pablo dice:
20 Nov 2013
¡Hola Eva!
Me alegro mucho de que el símil te haya parecido adecuado. Por supuesto que hay mucho más que contar sobre las nanopartículas, sus características y sus aplicaciones, pero se me ocurría que esto podría ser un principio. A mí las cosas me “entraban” mejor con imágenes (más aún si me resultaban familiares) y en casa siempre había cómics de Astérix (¡qué importantes los cómics para enganchar a los pequeños a leer!) así que bueno, lo he intentado, :).
Será gracioso pensar en los soldados aterrorizados frente a Obélix en el próximo congreso de nanoalgo (espero que no sea de nanofartons!)
Pasaba por aquí dice:
3 Dec 2013
¿Qué os pasa a los piratas con la horchata? 🙂
Pablo dice:
4 Dec 2013
¡Es como nuestro ron! 🙂